En los sistemas de condominio centralizados, que suelen tener una distribución en anillo, el contador de energía es el instrumento a través del cual se pueden dividir los costes de calefacción entre las viviendas de manera sencilla y fiable.
Su medida se expresa en kWh según las directrices de la norma europea específica de referencia EN 1434, y existen varios tipos que se diferencian tanto por su utilidad como por la tecnología utilizada.
Los contadores compactos miden la energía térmica suministrada a los hogares y pueden utilizarse en sistemas de calefacción y refrigeración, mientras que los contadores compuestos son los instrumentos ideales para medir la energía en centrales térmicas o redes de calefacción urbana.
Tanto los contadores compactos como los compuestos pueden ser mecánicos o ultrasónicos; estos últimos no solo garantizan una medición más precisa, sino que también gozan de una certificación MID más duradera.
Por último, los contadores de energía pueden equiparse con diferentes tecnologías para transmitir los datos de consumo.
En nuestro catálogo, hemos seleccionado la tecnología M-BUS inalámbrica y M-BUS cableada para los contadores compactos, y la tecnología M-BUS cableada o de salida Reed para los contadores compuestos.